VIRGEN DE LOS ÁNGELES.

 Pon en manos del Señor todas tus obras, y tus proyectos se cumplirán.

(Proverbios 16:3)



HERMANDAD DE LAS AGUAS.

 Podrán desfallecer mi cuerpo y mi espíritu, pero Dios fortalece mi corazón; Él es mi herencia eterna.

(Salmo 73:26)



CRISTO DE LA VICTORIA.

 Vivimos por fe, no por vista.

(2 Corintios 5:7)



HERMANDAD DE PASIÓN.

Pero Él me dijo: «Te basta con mi gracia, pues mi poder se perfecciona en la debilidad».

(2 Corintios 12:9a)



HERMANDAD DE SAN PABLO.

 ¿Qué diremos frente a esto? Si Dios está de nuestra parte, ¿quién puede estar en contra nuestra?

(Romanos 8:31)





ALABADO SEA DIOS.

 Alabado sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en las regiones celestiales con toda bendición espiritual en Cristo.

(Efesios 1:3)



HERMANDAD LOS GITANOS (GRANADA).

 Ustedes quédense quietos, que el Señor presentará batalla por ustedes.

(Éxodo 14:14)



PROVERBIOS.

 Confía en el Señor de todo corazón, y no en tu propia inteligencia.

Reconócelo en todos tus caminos, y Él allanará tus sendas.

(Proverbios 3:5-6)



JESÚS DEL GRAN PODER.

 No te dejes vencer por el mal; al contrario, vence el mal con el bien.

(Romanos 12:21)


CAUTIVO.

 El Señor fortalece a su pueblo;

el Señor bendice a su pueblo con la paz.

(Salmo 29:11)



ESTRELLA.

 Mas a cuantos lo recibieron, a los que creen en su nombre, les dio el derecho de ser hijos de Dios.

(Juan 1:12)



CRISTO DEL BUEN FIN.

 Todo lo puedo en Cristo que me fortalece.

(Filipenses 4:13)



HERMANDAD DE MONTSERRAT.

 El SEÑOR es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré?

El SEÑOR es la fortaleza de mi vida; ¿de quién me he de atemorizar?

(Salmo 27:1)



QUINTA ANGUSTIA.

 Pero ustedes son linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo que pertenece a Dios, para que proclamen las obras maravillosas de aquel que los llamó de las tinieblas a su luz admirable.

(1 Pedro 2:9)



HERMANDAD DE JESÚS DESPOJADO.

 Prueben y vean que el Señor es bueno; dichosos los que en Él se refugian.

(Salmo 34:8)



VIRGEN DE LA PAZ.

 ¡Dios es mi salvación!

Confiaré en él y no temeré.

El Señor es mi fuerza,

el Señor es mi canción;

¡Él es mi salvación!

(Isaías 12:2)



TRES CAÍDAS.

 Pidan, y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen, y se les abrirá.

(Mateo 7:7)



DISFRUTAD.

 El tiempo que se disfruta es el verdadero tiempo vivido.



HERMANDAD DEL AMOR.

 El que salga vencedor se vestirá de blanco. Jamás borraré su nombre del libro de la vida, sino que reconoceré su nombre delante de mi Padre y delante de sus ángeles.

(Apocalipsis 3:5)



CRISTO DE LA FUNDACIÓN.

 Humíllense, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que Él los exalte a su debido tiempo. Depositen en Él toda ansiedad, porque él cuida de ustedes.

(1 Pedro 5:6-7)



HERMANDAD DE LA ESTRELLA.

 Aun en la vejez, cuando ya peinen canas, yo seré el mismo, yo los sostendré. Yo los hice, y cuidaré de ustedes; los sostendré y los libraré.

(Isaías 46:4)



HERMANDAD DE LA CENA.

 Les dijo: «Vayan por todo el mundo y anuncien las buenas nuevas a toda criatura. El que crea y sea bautizado será salvo, pero el que no crea será condenado.

(Marcos 16:15-16)



CORPUS CHRISTI.

 Cuando creas que Jesucristo te ama y te espera, aparecerá en ti el deseo de la Eucaristía.



TRIANA.

 El Señor es mi roca,

mi fortaleza y mi libertador.

(2 Samuel 22:2)



HERMANDAD DE LAS AGUAS.

 Por lo tanto, mis queridos hermanos, manténganse firmes e inconmovibles, progresando siempre en la obra del Señor, conscientes de que su trabajo en el Señor no es en vano.

(1 Corintios 15:58)



NAZARENO.

 Pero el Señor es fiel, y Él los fortalecerá y los protegerá del maligno.

(2 Tesalonicenses 3:3)



CACHORRO DE TRIANA.

 Ustedes, hermanos, no se cansen de hacer el bien.

(2 Tesalonicenses 3:13)



LA PROMESA.

 Esta es la promesa que él nos dio: la vida eterna.

(1 Juan 2:25)



HERMANDAD DE SAN GONZALO.

 El que está en ustedes es más poderoso que el que está en el mundo.

(1 Juan 4:4b)



SEÑOR OMNIPOTENTE.

 Devorará a la muerte para siempre; el Señor omnipotente enjugará las lágrimas de todo rostro.

(Isaías 25:8a)