Foto: Conchita Estéban.
Tengo el corazón partido
entre dos advocaciones
las dos consuelan mi alma
las dos me dan ilusiones
Mi Cristo el de Tres Caidas
El es el Rey de Triana
y pasea sus angustias
por las calles Sevillanas
Y mi Virgen Dolorosa
vestida de negro y plata
pasea por Zaragoza
llegada Semana Santa
Son una Madre y un Hijo
paseando su dolor
ese dolor sin consuelo
que sale del corazon
Ella dolor por su Hijo
El dolor por sus Hermanos
los dos dolores profundos
son dolores inhumanos
Y yo humilde pecadora
buscando en los dos consuelo
a ellos levanto mis ojos
y les pido desde el suelo:
Perdonadme mis pecados
darme cariño y ternura,
yo quiero daros mi amor
y paliar vuestra amargura.
MAITE CEBOLLADA
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Foto: Wikipedia.org
