DESPEDIDAS DE PASION. La Tertulia.


Durante estos primeros meses del año, en nuestra Tertulia, y a través de diversas publicaciones, os hemos ido transmitiendo algunos aspectos que, poquito a poco, nos iban preparando el camino hacia la Semana Santa. Todos juntos, y en esta “Casa de Pasión”, hemos vivido momentos preciosos viendo Cofradías en la calle, aprendiendo mediante imágenes cómo se visten los costaleros, conociendo a algunos cofrades a través de entrevistas, escuchando de fondo marchas procesionales y, por encima de todo, rindiendo Culto a nuestras Advocaciones más queridas. Ahora, ha llegado el momento, el reloj va marcando la cuenta atrás, y cada uno de nosotros viviremos estos días en nuestros respectivos pueblos o ciudades de forma distinta, según costumbres y tradiciones diferentes, pero siempre con la misma Fe. Así que, hay que apresurarse, lo más importante, que es nuestro interior, ya está casi preparado, pero aún faltan muchas cosas que, aunque secundarias, también son necesarias para nuestra penitencia. Hay que planchar túnicas, preparar costales, afinar instrumentos, sacar de los armarios mantillas, peinetas, Rosarios, Misales…, y nos queda muy poquito tiempo para ello. Por lo tanto, queremos despedirnos con la suficiente antelación y recordaros que, en esta Semana Santa, “seremos vuestros cinco sentidos” para ofreceros una vez de regreso todo lo que hayamos vivido. Así que, desde aquí, os decimos “adiós” con la mano, y “hasta la vuelta” con nuestro corazón.




Desde el último Domingo de Resurrección, nos hemos estado preparando para vivir la Pasión de Cristo junto a Él y a su Madre, y lo hemos hecho tanto en comunidad a través de nuestras Hermandades, como a nivel individual buscando a Dios en nuestro interior. Pero en estos días de Cuaresma, todo se ha intensificado, se ha teñido de un “morado Pasión” que colorea interiormente nuestra penitencia. Los Triduos, Quinarios, Besamanos, Vía-Crucis, y nuestras propias oraciones personales, han adquirido un carácter totalmente Pasionista, y por tanto, en los próximos días, cada uno de vuestros amigos tertulianos, viviremos la Semana Santa con nuestras respectivas Cofradías, con diferentes túnicas e incluso separados físicamente unos de otros por cientos de kilómetros que harán que nuestros lazos de unión sean todavía mas fuertes.  Unos participaremos en las Procesiones de Sevilla, otros en las de Zaragoza y algunos en las de ambas ciudades, así que desde aquí os queremos contar cómo vamos a vivir esta Semana Santa.



MIGUEL

- A Zaragoza -


“Para mi la Semana Santa es un cúmulo de sentimientos y sensaciones que vivo intensamente: los colores, el olor a incienso, el sonido del tambor, la hermandad entre cofrades, y sobre todo la devoción hacia mi Virgen y la emoción de la noche del Jueves Santo cuando escucho decir a D. Antero LA PIEDAD ESTA EN LA CALLE.”



PILAR

- A Zaragoza y después a Sevilla -


“Sentimiento y Pasión. Un año para recordar ……, especial. Dejaré a mi Dolorosa recorriendo las calles de Zaragoza, no sin nostalgia, pero me la llevo en mi corazón al igual que a todos con los que he compartido muchos años. Me voy a Sevilla a vivir el dolor y la Esperanza de forma diferente pero con la misma Esencia, buscando el mismo fin, la alegría de la Resurrección.”



BEA

- A Zaragoza -


“Ya queda poco, los tambores se oyen, los ensayos se repiten y los preparativos se suceden. Algo espero que suceda en la noche de Zaragoza, y es que mi Virgen Dolorosa vea otra vez más, cómo su Hijo camina hacia su muerte cercana y a su resurrección por Él anunciada. Todos tienen recuerdos de esa noche tan esperada, pero yo solo tengo en mi memoria lágrimas de mis hermanos cofrades, del cielo y por supuesto de nuestra Madre Dolorosa. Espero que este año podamos acompañar a nuestra Madre en su Encuentro Doloroso con su Hijo.”



CONCHITA

- A Sevilla -


“Parece que fue ayer cuando bajé a Sevilla por primera vez y este va a ser ya el octavo año. Todos han sido especiales y de todos guardo recuerdos imborrables, con muchas experiencias vividas totalmente nuevas para mi y que me han dejado huella. Pero a todo esto, este año se añade que van a bajar casi todos mis amigos de la Tertulia y eso me hace esperarla todavía con más ilusión. Compartir con ellos todo lo que vivimos allí, Ya lo hicimos hace dos años con mis queridos Domingo y Maite pero ahora vamos a ser más y eso me hace muy feliz.”




ALEX

- A Zaragoza -


“Queridos tertulianos, un año más hemos comenzado los ensayos, ensayos que se empiezan con ganas e ilusión, que se traducen en reencuentro con los hermanos, esos hermanos con los que compartes esa época del año, tan fría y gris que lleva a otra época de luz y esperanza, esos mismos hermanos con los que compartes un Cristo, una Virgen, un sentimiento, el sentimiento que nos lleva cada Semana Santa, a las 0 horas del Viernes Santo a arropar a NUESTRA SEÑORA DE LA PIEDAD, con su dolor de Madre por las calles de nuestra ciudad, Zaragoza. Esto es una tradición que se vive intensamente en casa y deseo inculcar a mis descendientes. Al acabar esta época, gracias a la Tertulia Cruz Arbórea, nuestra llama de Fe y sentimiento sigue viva durante todo el año. Gracias por todo hermanos.”




OMAR

- A Zaragoza y después a Sevilla -


“Mi  Semana Santa este año va a ser algo inolvidable. Vuelvo a pisar esa tierra que tanto me gusta y que tanto me ha dado. Esta Semana Santa se puede decir que mi sueño esta cada vez más cerca..... Seguro que este año, como muchos otros, quedaran momentos grabados en mi cabeza y en mi retina…. Momentos que serán difíciles de olvidar y que siempre recordaré. Eso sí CORAZÓN, FE, SENTIMIENTO y ESPERANZA no faltarán.”




LUIS

- A Zaragoza -


“Tras un año con significativos cambios en mi vida, esta Semana Santa la viviré con intensidad, como todas, pero con la obligación de darle gracias a Nuestro Señor por permitirme seguir disfrutando de mi padre, la persona que me enseñó a amar al Nazareno. El Viernes Santo en Zaragoza, rodeado del aroma de incienso, un año más ante mi Cristo de la Cama, me sentiré orgulloso de ser uno de sus seguidores.”




BEA

- A Zaragoza y después a Sevilla -


“Esta semana santa se presenta muy bien, rodeada de los que más quiero y con esperanzas de pasarlo bien. Estaremos en Sevilla rezando nuestras Hermandades y sobretodo dándoles las gracias. Pero aunque estemos allí, nos acordaremos mucho de lo que hemos dejado por Zaragoza, de cómo nuestras Cofradías saldrán otro año más a la calle y Nuestra Madre el Miércoles Santo se volverá a encontrar con su hijo. Pero ya tenemos muchas ganas de estar allí y disfrutar como sé que lo haremos.”



RUBEN

- A Zaragoza -


“Parecía que no llegaba nunca y ya estamos preparando la Semana Santa de 2.012, en la que cumpliré quince años de vida cofrade. Será igual y distinta (a la vez) que todas las demás: los mismos Pasos, las mismas procesiones, los mismos ojos conocidos bajo capirotes y terceroles... Este año la Hermandad de San Joaquín y de la Virgen de los Dolores de Zaragoza (mi Hermandad) realizará su 75ª Salida Procesional, 75 Años de Historia Viva. Será emocionante recordar a todos los que lo han hecho posible al atravesar el umbral de San Cayetano.




NIEVES

- A Zaragoza -


“Son difíciles de expresar en pocas líneas los sentimientos que se viven en Semana Santa al revivir la muerte y resurrección de Jesús, representada por las diferentes cofradías de Zaragoza y cómo sus hermanos unidos por una fe común acompañan con devoción a sus Imágenes. Como dama de mantilla que procesiona en La Piedad hay muchos momentos emotivos, pero el que más sentimientos me despierta es cuando el Jueves Santo la Piedad sale a la calle llena de humildad, dolor y amor con su Hijo en el regazo y acompañada por todos los cofrades.”




PEPE

- A Sevilla -


“Si Dios quiere, iré a Sevilla como cada año para hacer la Estación de Penitencia junto a mi Cristo del Cachorro y mi Virgen del Patrocinio. Viviré momentos de recogimiento, de Fe y de reconciliación con Ellos, momentos de redención, de humildad, de emoción por exponer nuestras Imágenes al Culto externo por las calles de esa Híspalis que, cada primavera, narra de una forma especial la Pasión de Cristo cual Quinto Evangelista…, momentos de compartir, de exaltar y de unir en un solo corazón con toda la Tertulia nuestro amor a Jesús y a María, y aunque dos ciudades nos separen, estaremos enlazados por una misma Oración mientras esperamos su Resurrección.”



MAITE

- A Zaragoza y después a Sevilla -


“Espero si Dios quiere poder pasar mi Semana de Pasión, en Sevilla, participando de todo lo que pueda, viviéndola a tope en cada calle y en cada esquina, me gustaría poder hacer la Estación de Penitencia con mi Esperanza de Triana por primera vez,  al lado de mi compañero de fatigas, Domingo. Y espero poder compartir todos estos días con mis amigos, esos con los que comparto  lo bueno y lo malo, las ilusiones y algún que otro traspiés y con los que me une el Amor a Cristo por encima de todo. Espero disfrutar a tope de los desfiles procesionales, de las tertulias y como  he dicho antes, sobre todo de la compañía.”



LOLA

- A Zaragoza -


“Por fin el esfuerzo, el trabajo callado y nunca reconocido ni recompensado, que solo la gente que hace las cosas por los demás y por el bien general tendrá su recompensa en esta Semana Santa. Nuestra Virgen "la Señora", "la Reina de Oliver", nos acompañará por las calles de nuestra ciudad, y al llegar a San Cayetano, nos sentiremos orgullosos de ser cofrades y ser de “La Llegada” un año más.”



PEDRO

- A Sevilla -


“Nuestro querido Pepe me pidió hace ya unos días que compartiera con todos cómo iba a vivir esta próxima Semana Santa. La verdad es que más que un par de líneas voy a necesitar un par de Tomos para contaros todo lo que estoy ilusionado por vivir. Este año la vamos a pasar íntegramente en Sevilla, con nuestros amigos y hermanos, incluyendo mi primera Estación de Penitencia en la Hermandad de Columna y Azotes, más conocida por todos como las Cigarreras, portando un cirio. Es la primera vez que no voy a estar en toda la Semana Santa en Zaragoza, aunque en otras ocasiones hemos podido disfrutar con nuestros amigos y hermanos de Cartagena, hasta el Miércoles Santo, de su compañía y sus procesiones. Mismo día, misma advocación, pero distinta ciudad y distinta túnica, pero siempre siguiéndole a Él, atado a la columna y azotado por nuestra salvación; abandono mi ciudad para embarcarme en la forma de vivir las procesiones en el sur de España, donde una de las cosas que más me atraen es la devoción con la que se viven tanto dentro como fuera de la Hermandades. Ilusionado, porque ha acabado un "ciclo procesional", que no cofrade, para iniciar otro, en Sevilla, pero también en otras localidades a las que nos sentimos unidos por la amistad, por la familia o simplemente por el cariño. Un saludo para todos los seguidores del blog de la Tertulia y desearos una dichosa Estación de Penitencia tanto participéis con túnica como de espectadores de esta auténtica expresión popular de Fe.”



DAVID

- A Zaragoza -


“Pasan los años y cada año vivo la Semana Santa con más ilusión y entusiasmo. Para mi son unas fechas muy especiales y emotivas cuando ves a la gente disfrutar con el olor a incienso, los tambores resonando por las calles y por supuesto, las preciosas y emotivas imágenes que representan a Jesús y su Madre. Pero a mí lo que más me entusiasma es la muchísima gente que desde dentro o fuera de las cofradías se une para manifestar su amor y devoción en estos momentos tan importantes para los creyentes. Y esto es lo que espero con entusiasmo durante todo el año.”



DANI

- A Zaragoza y después a Sevilla -

“Esta Semana Santa va a ser muy especial para mi. Aparte de ir a ver la Semana Santa en mi querida Sevilla, este año va a ser muy especial para mi dado que por fin voy a poder salir de costalero debajo del Señor de la Humildad el Domingo de Ramos, y el Lunes Santo a oler a azahar, a pasear por el barrio con mas arte del mundo, y a  ver a esos cofrades esas bandas ese todo que tiene Sevilla. Espero que todo salga bien y esta Semana Santa sea todo lo especial que espero.”


DOMINGO

- A Zaragoza y después a Sevilla -


“Esta Semana Santa, espero y deseo que sea diferente. Empezaremos en Vísperas, acudiendo el Viernes de Dolores a la Misa de mi Hermandad de San Joaquín y de la Virgen de los Dolores, y asistiendo al Vía Crucis de la Hermandad de la Sangre de Cristo, recordando cómo de niño acudía con mi padre y portando su medalla cerca del corazón. El sábado será día de preparativos de viaje, de Pregón, de retranqueo con los Santísimos Titulares de la Hermandad de Jesús de la Humildad y María Santísima del Dulce Nombre de Zaragoza. Domingo de Ramos, día grande, día de Palmas, de ver a la Entrada de Jesús en Jerusalén y acompañar a mi hijo en su primera Estación de Penitencia como costalero de Jesús de la Humildad, y seguir a María del Dulce nombre tras su Palio, siendo su contraguía. El Lunes Santo, viaje a Sevilla, reencuentro con amigos, algo más que amigos; disponernos a vivir experiencias inolvidables e inigualables y esperando la Madrugá del Viernes Santo para acompañar a Nuestra Señora de la Esperanza y a su Santísimo Hijo de las Tres Caídas, en mi primera Estación de Penitencia, y con quién mejor que con mi mujer, Maite, esa acompañante fiel en el duro caminar de esta vida terrenal. Es difícil explicar en pocas líneas lo que me gustaría hacer, algo seguro se queda en el tintero, pero sí deciros que algo que me gustaría hacer, sería daros a todos un fraternal abrazo en Cristo y desearos a todos una gran Semana Santa.”



VIRGINIA

- A Sevilla -


“Cuando hace veinte años procesioné por primera vez con mi querida Cofradía de Zaragoza, quizás no imaginaba -aunque siempre me llamó por la sangre andaluza que corre por mis venas- que este año, Dios mediante, voy a vivir la Semana Santa de un modo diferente: Nuestro Señor Jesucristo Atado a la Columna ha querido que, no sólo no le vea este año por las calles de Sevilla sino que Pedro luzca por primera vez su túnica cigarrera que tanta ilusión y alegría me produce. Por ello, mi corazón blanco y rojo, californio y cigarrero, se abre para recibir a Sevilla en su esplendor. No sería capaz de transmitiros la emoción que envuelve para mí  todo lo que gira en torno a ésta experiencia y los sentimientos que en mi  generará. Que Nuestra Señora en sus advocaciones de Fraternidad, Primer Dolor y Victoria nos bendiga. Un fuerte abrazo.” 



JAVIER

- A Zaragoza -


“Ya se acerca la hora, ya estoy ansioso por que caiga la noche del Miércoles Santo en el barrio Oliver, ya quiero ver a mi Cofradía en la calle y a Nuestra Señora del Perdón procesionar como Ella ha querido este año, con su diadema y su manto bordado, con su cabeza coronada y su cuerpo solemne bordado de pasión. Necesita un buen manto para arropar a su hijo maltrecho y despojado en su llegada al Calvario.”


Sevilla y Zaragoza. Dos ciudades unidas por una Tertulia.


Y si hay algo realmente importante y por lo que tiene sentido nuestra “bendita locura”, son Ellos, nuestros Titulares, a quienes acompañaremos en su dolor camino del Calvario bajo el poder de un mismo Dios, el que hará, como cada primavera, que su Hijo muera en la Cruz para salvarnos mientras su Madre llora en la Calle de la Amargura. De Él seremos su cirineo, para ayudarle a llevar la Cruz, y de Ella su San Juan y su María Magdalena, para secarle las lágrimas con el calor de nuestras túnicas. Miradlos, ahí están, siempre esperándonos, como cada año, como cada día, como cada momento de nuestra vida.


Esperanza de Triana. (Sevilla)

Stmo. Cristo de la Cama. (Zaragoza)


Nuestra Madre y Señora del Patrocinio. (Sevilla)


Jesús de la Humildad. (Zaragoza)


María Santísima de la Victoria. (Sevilla)


La Piedad. (Zaragoza)


El Cachorro. (Sevilla)


Virgen de los Dolores. (Zaragoza)


Señor de Columna y Azotes. (Sevilla)


María Santísima del Dulce Nombre. (Zaragoza)


Stmo. Cristo de las Tres Caídas. (Sevilla)


Nuestra Señora del Perdón. (Zaragoza)


Y ya sabéis algo más de nosotros amigos, hemos sacado esa “Fe Pasionista” que llevamos dentro y os la hemos regalado para que nos conozcáis un poquito más y sepáis cómo vamos a pasar estos días tan importantes para los cofrades. Tan sólo deciros que nos acordaremos mucho de vosotros, que rezaremos por todos, y que os haremos un huequecito para llevaros en el bolsillito de la túnica, en la faja de costalero o en el broche de la mantilla.

Hasta la vuelta amigos, y un beso enorme con todo nuestro corazón.

La Tertulia.

DE TERTULIA CON... MANOLO VIZCAYA. Pepe Lasala.

Hoy en nuestra Tertulia, y debido al escaso tiempo que queda para la Semana Santa, hemos creído conveniente tratar un tema como es la prevención y el cuidado del costalero. Para ello, vamos a hablar con un hombre que, respecto al asunto que nos ocupa, conoce a la perfección dos disciplinas fundamentales: la medicina y el mundo del costal. Durante 16 años, fue bajo el Paso de Nuestro Padre Jesús en su Soberano Poder ante Caifás de la Hermandad de San Gonzalo; posteriormente,  pasó a dirigir como capataz varias cuadrillas de costaleros, contando en estos momentos con 31 años de experiencia; es en la actualidad la “voz de mando” del Paso de Nuestro Padre Jesús de las Penas de la Hermandad de la Estrella y de La Oración en el Huerto de la Hermandad de Monte-Sión. Además, en su vida profesional ejerce la medicina. Hoy en nuestra Tertulia hablamos con Manolo Vizcaya.





Pero antes de comenzar con nuestra entrevista, para quien no conozca el argot utilizado por los costaleros y no esté introducido en este apasionante mundo, voy a apuntar aquí unas breves definiciones según el Gran Diccionario de la Semana Santa de Juan Carrero Rodríguez:






Capataz: Jefe de los costaleros, que tiene a su cargo el buscar y formar una serie de hombres, y bajo su voz de mando, llevar la conducción del Paso.

Costalero: Persona que soporta sobre la cerviz el peso de los Pasos de nuestras Procesiones.

Costal: Prenda que el costalero se coloca en la cabeza para protegerse la cerviz a la hora de soportar el peso del Paso.

Trabajadera: Travesaño de madera de unos diez centímetros de grueso, que cruza paralelamente el ancho del Paso de extremo a extremo, y sirve para que los costaleros coloquen bajo la misma su cerviz, y hagan fuerza hacia arriba para cargar con el Paso.



Trabajadera.



Igualá: Acto que realiza el “capataz” momentos antes de la Procesión o en un ensayo, para igualar a los costaleros según la altura de su cerviz (séptima vértebra cervical donde se apoya la “trabajadera” sobre el costalero). Es decir, tallar a los costaleros por su altura. Los más altos van en la parte delantera del Paso, y los de menor altura en la parte trasera.

Relevo: Se conoce por este nombre, el que efectúan los costaleros en el transcurso de una Procesión, con objeto de dar descanso a sus compañeros.

Corría: Expresión utilizada por el costalero, para indicar que ha realizado su trabajo completo durante la Procesión.

Hacerse la ropa: Faena que consiste en plegar el costal, y fijarlo bien a la cabeza con la ayuda de un compañero, el cuál tira desde la parte de atrás del costal para evitar que se hagan arrugas y el costalero se pueda lastimar.



Costaleros haciéndose la ropa.



Cuadrilla: Grupo de hombres que llevan sobre sí la responsabilidad de sacar, entrar y conducir los Pasos por las calles de una localidad.

Y ahora ya, después de estas breves nociones, comenzamos con la entrevista.

Para comenzar Manolo, ¿cuántos kilos aproximadamente suele soportar un costalero?
La media aproximada puede estar entre 35-40 kilos, eso basándonos por supuesto en una correcta “igualá” y un terreno plano, lo que ocurre en la realidad y debido a los desniveles de la calle es que ese peso se puede multiplicar o disminuir.

El calor acumulado bajo las trabajaderas puede llegar a ser excesivo, ¿qué temperaturas pueden alcanzarse?
En Semana Santas especialmente calurosas se pueden llegar a alcanzar temperaturas por encima de los 45º C.



Costalero bajo las trabajaderas.



A día de hoy, el número de hombres que participan en nuestras Procesiones como costaleros es bastante elevado, y puede darse el caso de que no todos ellos sean capaces de soportar el esfuerzo. ¿Cómo se sabe que un costalero está realmente preparado?
Para ello están los ensayos, donde el capataz debe de observar ,conocer y enseñar a todos y cada uno de sus hombres, y de esta forma personalizar los relevos según crea mas conveniente, de manera que aproveche al máximo el esfuerzo que cada uno sea capaz de realizar.



El capataz Manolo Vizcaya con los hombres de su cuadrilla.


¿Qué tipo de entrenamiento se recomienda a lo largo del año para que el costalero esté en perfecta forma cuando llegue la Cuaresma?
Pues lo normal para mantener nuestro cuerpo en un óptimo estado, footing y algo de gimnasio para mantener un buen tono muscular.


¿Piensa que el costalero debería de estar sometido a controles médicos desde que dan comienzo los ensayos hasta finalizar la Semana Santa?
Si durante el año se tiene una preparación física correcta, no creo que sea necesario mientras no se detecte alguna dolencia.

En Sevilla, cada Semana Santa abre sus puertas el Centro de Atención al Costalero, ¿de qué forma se actúa en él y con qué recursos humanos y técnicos cuenta?
Pues según tengo entendido en el prestan servicio traumatólogos y fisioterapeutas pero desconozco exactamente su funcionamiento y recursos, aunque es indiscutible la importantísima labor que llevan a cabo con los costaleros que a él acuden.

Centro de Atención al Costalero.


Hay costaleros que sacan Cofradías durante varios días seguidos, ¿cuánto tiempo es necesario para que un hombre se recupere plenamente desde que termine de sacar un Paso hasta meterse en el siguiente?
Pues después de un esfuerzo de tales características, al menos serian necesarias 48 horas para una recuperación óptima, lo que ocurre que con una buena condición física y una alta dosis de afición, el costalero pasados los primeros momentos de fatiga y dolor que siente hasta que vuelve a calentar los músculos y se le “duerme” el cuello, es capaz de volver a soportar una nueva “corría” sin la recuperación aconsejada. No olvidemos que los costaleros “antiguos” sacaban un Paso cada día y en la Madrugá doblaban.

¿Aconseja a los costaleros de sus cuadrillas alguna dieta especial?
No. Pero sí que eviten el sobrepeso.

En cuanto a la ropa, últimamente se ven algunos costales colocados de tal forma que llegan a cubrir en gran medida los ojos, y hay quien piensa que esta “moda” puede producir lesiones sobre el costalero, ¿qué opina al respecto?
Hombre, si es porque se choquen contra una farola porque no pueden ver bien, pues sí, pero por lo demás no veo ningún problema, recuerda que bajo el paso todos son “ciegos”.

En cuanto a la faja, ¿cuál es más recomendable, la tradicional o la ortopédica?
Creo que la adaptación de la tradicional a nuestra anatomía es perfecta, y si además refuerzas su fijación con la ortopédica pues mejor.


Costaleros colocándose la faja.


Y si hablamos del calzado, ¿aconseja la alpargata de esparto o la deportiva?
Creo que la deportiva “abriga” mejor el pié, pero yo aconsejo que se pongan aquella con la que trabajen mas cómodos, que por lo general suelen ser las “tenis”.



Calzado de los costaleros.



¿Qué otros aspectos debe de tener en cuenta un costalero a la hora de hacerse la ropa?
Que todos los componentes de la misma estén en perfecto estado de “revista”, que el costal asiente en el sitio (apófisis espinosa de la séptima vértebra cervical).



Columna vertebral. “C7” = séptima vértebra cervical.



Existe un factor externo, como es el asfaltado de las calles, que repercute de alguna manera sobre el costalero, ¿en qué medida le afecta?
Pues como antes os expliqué sus desniveles pueden incrementar o disminuir notablemente el peso que debe soportar el costalero.


Otro factor, mucho más directo que el anterior, es el capataz. ¿De qué forma éste puede influir para que sus hombres no sufran debajo del Paso?
Este es un factor primordial ya que del capataz y de su supuesto conocimiento técnico depende todo, la preparación del costalero, la igualà, los relevos etc.



El capataz Manolo Vizcaya.



Si nos referimos directamente a las lesiones, con los años, en algunos casos, aparece en la parte cervical el famoso “morrillo”, llegando incluso a ser necesaria la intervención quirúrgica, ¿en qué consiste esta deformación y como puede evitarse?
Es, podemos decir, un mecanismo de defensa del organismo, de la misma manera que los callos de las manos de los trabajadores del campo por ejemplo. Es una proliferación de tejido conjuntivo (fibras de colágeno y tejido adiposo) en reacción al trauma repetido sobre esa zona, claro que también se debe contar con cierta predisposición genética, por ello no afecta de igual modo a todos los costaleros.


Deformación en la zona cervical.



¿Qué otro tipo de lesiones son también frecuentes y de qué manera pueden prevenirse? 
Son frecuentes contracturas y roturas musculares, así como lesiones que afectan a los discos intervertebrales tales como pinzamientos y protrusiones discales, etc. La forma de evitarlas son una correcta preparación física, un calentamiento y estiramiento idóneo antes del esfuerzo, una “ropa” bien hecha, y un conocimiento exhaustivo de la técnica junto a una buena “igualá”.


Ni que decir tiene que muchos jóvenes están impacientes por meterse en las cuadrillas de sus Hermandades, ¿qué edad es la más apropiada para iniciarse como costalero y de qué forma debe de hacerse?
La edad ideal creo que de los 18 a los 20, aunque depende mucho del desarrollo físico de cada uno, y lo ideal es ir formándose poco a poco en los ensayos hasta ver que conozca adecuadamente el trabajo como costalero.



Costalero de 18 años en su primer ensayo.


Y por el contrario, existe alguna edad aproximada a la que sea aconsejable “colgar” el costal?
Pues yo no sabría decirte una en concreto, depende de la constitución y preparación física de cada uno. Los hay con 50 corriendo maratones y otros con 35 no suben ni a un tercer piso si no es por el ascensor.


La forma de llevar los Pasos con costaleros, se ha extendido por muchos rincones de España donde no existía tal tradición, contando las cuadrillas con poca experiencia y careciendo de alguien de quien aprender. ¿Qué recomendaciones les daría tanto a capataces como a costaleros en estos casos?
Pues hoy día la información es rápida y fácil de conseguir, pues contamos con los medios que todos conocemos y que nos facilitan el conocimiento, pero de todas formas yo les animo a que se acerquen físicamente al lugar, a la cuadrilla, al capataz, etc., con quien se sientan mas identificados y no duden en exponer sus dudas e inquietudes, que seguro les ayudaran en todo lo que sea posible.

Aunque en Sevilla no es habitual, existen lugares donde las mujeres salen como costaleras; no me voy a referir en esta pregunta al hecho de si están más o menos preparadas que los hombres, pues a día de hoy todo el mundo realiza mucho deporte y está en perfecta forma física, sino a cómo afecta el esfuerzo realizado a unas y a otros, es decir, ¿repercute de diferente forma dicho esfuerzo sobre el organismo humano de ambos sexos?
Yo creo que no, lo que ocurre es que el cuerpo del hombre por lo general esta mejor dotado para realizar ese esfuerzo físico, y a la hora de poder elegir se escoge a los mas dotados. Si no hubiesen suficientes hombres o estos no estuviesen físicamente bien preparados pues no creo que fuese ningún problema contar con mujeres. Aunque yo personalmente no haría cuadrillas mixtas.

Y ya para terminar, y si hablamos un poquito de Semana Santa, ¿cómo la vas a vivir este año?
Pues la verdad que como siempre con la ilusión y las mismas ganas que cuando era un niño.

Muchísimas gracias Manolo por compartir este ratito de tertulia tan agradable con nosotros.
A vosotros por considerarme digno para poder aportaros algo nuevo de este nuestro mundo cofrade.

DE TERTULIA ENTRE AMIGOS. Pepe Lasala.

Hoy en nuestra Tertulia, continuamos con la sección “De tertulia entre amigos”, en la cuál, a través de un cuestionario, conoceremos los gustos y preferencias en lo que a Semana Santa se refiere de cada uno de las miembros fundadores de esta Tertulia. En esta ocasión, el turno es para un servidor,  así que voy a quitarme el capirote para que me conozcáis más a fondo, y aunque me haya extendido un poquito, espero que os guste.

Nombre.
Pepe Lasala López.




¿A qué Hermandades perteneces?
la Hermandad del Cachorro de Triana (Sevilla), a la Esclavitud de Jesús Nazareno de Zaragoza y al Señor Atado a la Columna también de Zaragoza.


En el Altar de la Iglesia de mi Hermandad con el Stmo. Cristo
 de la Expiración “El Cachorro” y la Virgen del Patrocinio.


Una razón o más por las que eres cofrade.
En mi familia siempre se ha vivido la Semana de Pasión con mucho fervor. Desde que tengo uso de razón, nos echábamos a la calle todos juntos para ver Cofradías y para ir a las Iglesias a visitar los Monumentos. Era una época del año muy especial en mi casa, que tanto mis padres, como mis dos hermanas y yo, esperábamos con entusiasmo. Ya en la Cuaresma, siendo muy pequeño, cuando me acostaban por la noche, nos quedábamos escuchando los tambores que ensayaban para la Procesión, pues se oían desde mi cuarto. Recuerdo cómo mis padres nos contaban la Semana Santa de su niñez y su juventud, cómo nos llevaban de un sitio a otro para que no nos perdiéramos ninguna Cofradía, cómo nos explicaban las cosas…, cómo nos enseñaban a comprender la Pasión de Cristo. De ellos  aprendí a amar la Semana Santa, y gracias a ellos soy cristiano y cofrade. Pertenecer a una Hermandad es un medio para fortalecer la Fe, el amor a Dios, a la Virgen y a los demás.


Mis padres. Un Viernes Santo a principios de los años 90.


De pequeño esperando a que llegue la Procesión. 
Se me ve de espaldas. Año 1.974.


Con mi madre y mis dos hermanas mientras pasa la Procesión. 
Yo soy el más bajito que se ve en la foto abajo a la izquierda. 
Año 1.974.


Un rincón especial para ti en Semana Santa.
Tengo varios. Por las mañanas, y sin Cofradías en la calle, me gusta acercarme a ver en sus Capillas al Gran Poder y al Nazareno del Silencio, también a la Iglesia de la Magdalena para ver el Descendimiento de la Hermandad de la Quinta Angustia y el Cristo del  Calvario. Luego cruzo el Puente de Triana  y me voy a ver a mi Cristo del Cachorro, a la Virgen de la Estrella y a la Esperanza de Triana. Todo ello con algún cafelillo de por medio en la plaza del Altozano. Me resulta muy gratificante ver algunas Imágenes  en sus Iglesias. Una vez que la tarde ya ha despertado, me bajo a la plaza del Duque para ver las primeras Cofradías. Luego me voy a buscarlas a mis rincones favoritos. La Amargura y el Amor saliendo de la Catedral, la Hermandad de los Panaderos en la Plaza del Salvador, Jesús ante Caifás de la Hermandad de San Gonzalo pasando por la Iglesia del Santo Ángel, la salida de la Bofetá (Jesús ante Anás), el Cristo del Buen Fin en la Plaza de San Lorenzo, la Exaltación y Los Servitas en la Encarnación, el Valle y Pasión entrando en la plaza del Duque, el Gran Poder en la calle Zaragoza, la Esperanza de Triana en Rioja, el Santo Entierro en la calle Alfonso XII… y por supuesto, un rincón muy especial es en el Templo del Cachorro, justo cuando todos los nazarenos ya hemos llegado a la Capilla después de realizar la Estación de Penitencia (también llamada Procesión), el momento en el que el Cristo se encara a la puerta para recogerse.


Jesús Nazareno de la Hermandad del Silencio en su Capilla. 

Stmo. Cristo del Calvario en su Capilla. 


El Cachorro en su Capilla. 

La Esperanza de Triana en su Capilla. 

 Puente de Triana.


Plaza del Altozano.


Cafelillo en la plaza del Altozano con mi amigo 
y miembro de esta Tertulia Domingo Figueras.


Vista desde la Plaza del Duque confluyendo Cofradías
 para entrar en la Plaza de la Campana. 


 Paso de Jesús ante Caifás de la Hermandad de San Gonzalo 
en la puerta de la Iglesia del Sto. Angel. 


Cristo del Buen Fin en la Plaza de San Lorenzo. 



A la hora de ver Cofradías, ¿prefieres quedarte en un sitio fijo a esperarlas o por el contrario te gusta ir a buscarlas?
La verdad es que hago un poco de todo. Me gusta ver las que pasan por debajo del balcón, las que vienen del arrabal Trianero para entrar en la "Carrera Oficial" (itinerario por el que pasan todas las Cofradías) hacia la Catedral. También, como he comentado antes, ver las primeras de la tarde en la plaza del Duque, y por supuesto ir a buscarlas para acompañarlas de recogida. Los ambientes cambian completamente si se contemplan las Cofradías durante su Procesión o si se hace cuando están a punto de entrar en sus Templos: el escenario, el público, el sonido… hasta el incienso huele diferente, todo cambia, no es mejor lo uno que lo otro, pero como comento, es muy distinto. También me gusta encontrármelas. En ocasiones, cuando vas callejeando en busca de una Cofradía, “sin querer” te encuentras a otra al doblar cualquier esquina. Ese es un momento excepcional. Concretamente el Martes Santo de 2.009 me ocurrió con la Virgen de la Angustia de la Hermandad de los Estudiantes, y aquella “estampa” nunca se borrará de mi mente, o el pasado año, al encontrarme el Paso de la Cena en la calle Trajano. También me gusta mucho ir a buscar de vuelta a las que pasan por la Plaza Nueva.




Jesús Despojado en la calle Rioja. 

La Cena en la calle Trajano. 


¿Qué no te perderías?
En general puedo decir que no me perdería la Semana Santa entera, pero si tengo que puntualizar, no me perdería mi Estación de Penitencia con mi Cristo del Cachorro y mi Virgen del Patrocinio, Ellos me acompañaron en un día tan especial como el de mi Boda (pues Conchita y yo nos casamos en su Altar), y yo les acompaño en su dolor el Viernes Santo; tampoco me perdería el Jueves Santo por la mañana en la Capilla de los Marineros, cuando un grupo de cofrades de la Hermandad del Cachorro, acudimos allí cada año para ofrecer  un ramo de flores a la Esperanza de Triana y rezarle una Salve; es un momento muy emotivo, donde nos confraternizamos de corazón con otros cofrades de nuestra vecina Hermandad. Los besos, abrazos y el cariño hacia ellos, se perciben en el ambiente mezclándose con el sentimiento y cariño a la Esperanza de Triana. Algo que tampoco me gustaría perderme son los paseos matutinos entre el Lunes y Miércoles Santo; ni el instante en el que llegamos desde Zaragoza a la estación de Santa Justa de Sevilla, cogemos un taxi, y durante el trayecto vamos observándolo todo sin perdernos ni un detalle, puesto que es Semana Santa y Sevilla está más guapa; no me perdería las buenas conversaciones con Conchita y con nuestros amigos mientras pasan las largas filas de nazarenos antes de que llegue el Paso; el ir corriendo de un sitio a otro para poder ver todas las Cofradías (las que se pueden); el Besamanos del Gran Poder; el Besapies de mi Cristo del Cachorro el Domingo de Resurrección; el momento en que entro en mi Casa Hermandad el Viernes Santo y me reencuentro con mis hermanos, a los que en ocasiones no he visto desde el año anterior; la primera Oración que dedico a mi Cristo y a mi Virgen  ya revestido con mi túnica y mi medalla; la cara de algunos niños y personas mayores cuando les das una estampita, las llamadas telefónicas y mensajes de los míos desde Zaragoza para desearme buena Estación de Penitencia, el momento totalmente íntimo y ritual en que me pongo la túnica de mi Hermandad, la mirada de Conchita cuando me ve vestido de nazareno (que tan sólo con observarla de refilón ya se qué es lo que me está diciendo y deseando), la imagen de cualquier Virgen por detrás cuando ya se aleja y le dices “hasta el año que viene” mientras se difuminan las notas musicales de la banda, la Macarena el Sábado Santo por la mañana con la carita cansada de la Madrugá… y si hablamos puramente de Cofradías, no me perdería, además de las que ya he nombrado en una de las respuestas anteriores, la Borriquita en la calle Cuna; la salida del Silencio o la del Gran poder (si voy a una no puedo llegar a la otra); la Virgen de la Estrella y La Piedad de la Hermandad del Baratillo en la Iglesia del Santo Ángel; el Cristo de Las Aguas en cualquier sitio; la Presentación al Pueblo de San Benito en la plaza del Duque; las Siete Palabras y las Penas de San Vicente en Alfonso XII; el Cristo de la Fundación de la Hermandad de los Negritos en la plaza de la  Encarnación; en el mismo sitio La Piedad de los Servitas, esperándolos en el Mesón Olalla tomándome algo; el Cristo del Calvario en la calle  O’Donell; el sonido que se produce al cerrarse las puertas de la Iglesia de San Lorenzo el Sábado Santo, un sonido que parece que habla diciendo que “todo está consumado”; el compás lejano de la Banda Virgen de los Reyes acompañando al Señor Resucitado a la Iglesia de Santa Marina…


Ajustándome el capirote antes de la Procesión. 

Acudiendo a la Iglesia de mi Hermandad el Viernes Santo. 
En Sevilla se acude con la cara tapada a la Procesión 
y se vuelve de la misma forma. 

Comienza la Procesión. 

Ofrenda de flores a la Esperanza de Triana 
con mis hermanos del Cachorro. 
(Abajo a la derecha de la foto)

Saludando a una hermana de la Esperanza de Triana tras la ofrenda. 
(Abajo a la derecha de la foto)

Besamanos del Gran Poder.

Besapies del Cristo del Cachorro el Domingo de Resurrección. 

 Stmo. Cristo de las Siete Palabras en la calle Alfonso XII.


En el Mesón Olalla esperando a La Piedad 
de la Hermandad de los Servitas. 

La Hermandad de los Servitas llegando a la Encarnación 
justo en la puerta del Mesón Olalla.


¿Con la salida de qué Cofradía te quedas?
Sin duda alguna con la salida de la Bofetá (Jesús ante Anas). Ese momento de espera para ver ponerse en la calle a la última Cofradía del Martes Santo, (después de haber repuesto fuerzas con unas croquetitas acompañadas de alguna bebida espumosa y refrescante en Casa Ricardo), mientras detrás de la Iglesia se escuchan “acordes de calentamiento” de las bandas de las Cigarreras y la Oliva de Salteras. La plaza de San Lorenzo “hasta la bandera” para ver a Jesús ante Anás y a la Virgen del Dulce Nombre evangelizando Sevilla. Me resulta espectacular el momento en que, tanto el Señor como su Madre, entran en la calle Conde de Barajas y se observa desde la estatua de Juan de Mesa cómo se van alejando; algo que no es una despedida, ya que en unas horas me reencontraré con ellos en la Plaza Nueva.


El Paso de Jesús ante Anás “La Bofetá” preparado 
para salir en la Iglesia de San Lorenzo. 

Virgen del Dulce Nombre. 

Estatua del escultor Juan de Mesa en la Plaza de San Lorenzo. 


¿Y con qué entrada?
Esta también la tengo muy clara. La Hermandad del Museo. Es algo para vivirlo cuarenta veces y me quedo corto: Plaza del Museo, luces apagadas, la oscuridad de la noche ha hecho que el murmullo de los cofrades sevillanos se apodere del “chirriar”  de esos pajarillos llamados vencejos que llegan a la ciudad cada primavera. Sólo se ven cabezas, te “acomodas” como puedes en medio metro cuadrado. Muchos optan por ver la Cofradía a través de las cristaleras del Bar Iscariote mientras refrescan sus paladares en medio de un buen ambiente cofrade. De repente, un silencio reposa sobre esta gran Plaza. La sombra de Cristo Expirante tiñe la fachada de la Capilla. Una saeta se escucha, este año será desde el balcón del Cielo (Pepe Peregil D.E.P.) y, casi sin ser acabada, enlaza con otra prima hermana de la anterior, que sale de la garganta y el alma de un devoto anónimo cuya sombra se adivina agarrada a la verja de una ventana. El Señor entra en su Templo y el silencio comienza a ser vencido por el “campanilleo” de los varales del Paso de la Virgen de las Aguas, entremezclado con sinfonías procedentes de unos músicos llenos de corazón y de sentimiento… “¡Qué guapa estás Madre! Y cuánta paz nos entregas con tu mirada.”  Para mí, una de las Vírgenes con el rostro más “humano”. Es una mujer guapa, con la cara “lavá” y la toca muy bien puesta. Poquito a poco se dispone a entrar por la puerta de su casa para quedarse con su Niño. Aplausos, rezos, lágrimas, miradas… muchas miradas hacia Ella repletas de emoción, se entrelazan en uno de los ambientes, a mi parecer, más puramente cofrades.


La Virgen de Las Aguas, uno de los rostros más humanos
 de la Semana Santa de Sevilla.


No entiendes la Semana Santa sin…
Sin devoción, sin Fe, sin penitencia, sin amor, sin cristiandad, sin hermanamiento, sin caridad…, pero tampoco la entiendo sin todo aquello que la envuelve de un ambiente especial y que nos acerca a Dios y a María de una forma particularmente maravillosa,  por lo que no la comprendo sin Cofradías en la calle; sin los momentos de recogimiento y sin los de aplausos, sin procesiones de silencio y sin bandas; sin saetas y sin Oraciones; sin hermandades de centro y sin las de barrio; sin túnicas de capa y sin las de cola; sin alegría y sin llanto; sin piropos y sin rezos anónimos; sin abstinencia y sin bacalao con tomate, sin olor a incienso y sin aroma de puesto de calentitos (churros); sin estrenos de Domingo de Ramos (dicen que el que no estrena ese día se le caen las manos) y sin el mismo Rosario que llevo cada año para la Estación de Penitencia;  sin nazarenos, costaleros y músicos; sin Capillas y sin bares cofrades; sin cofrades autóctonos y sin turistas de “lengua de trapo”, pantalón corto y cámara en mano que no se pierden una; sin niños y sin sus abuelos, que los llevan a ver su primera Cofradía; sin aplausos y sin los chssssssssss… que en ocasiones molestan lo suyo pero también tienen su sitio en la Semana Grande; sin las miradas de ojos emocionados y sin las de los objetivos de los “tira-fotos” de  turno que tras empujarte se han colocado con sus cámaras delante de ti arruinándote el sitio que habías cogido desde hace cuatro horas; sin los palcos del Ayuntamiento y sin bulla en la calle; sin el que silba al compás de una marcha rompiendo el momento estelar de cualquier Paso de Palio por una calle romántica y sin el que lo mira arqueando la ceja para indicarle que está molestando; sin botellín de agua en el bolsillo de la túnica para aguantar doce horas de Procesión y sin cervecita fría en la puerta de cualquier taberna viendo al Cristo de la Salud llegar desde el barrio de San Bernardo una calurosa tarde de Miércoles Santo;  sin las miradas al cielo mientras se reza para que los Ángeles no lloren; sin estampitas y sin medallitas para repartir a los devotos; sin los más pequeños diciendo “nazareno dame un caramelo” y “nazareno dame cera”; sin los despertares junto a Conchita cada día de la semana donde amanece una nueva ilusión; sin ese momento tan bonito en que los papás le susurran a su niño en voz muy baja “échale un besito a la Virgen y otro al Señor”; sin el vendedor de “a la rica arvellana” en las sillas de la Carrera Oficial  (al que se le oye desde Huelva anunciando frutos secos para la venta) y sin el silencio que se produce cuando pasa por la Avenida la Soledad de San Lorenzo; sin café y sin tostá de paté a las tantas de la mañana para reponer fuerzas; sin el que se baja la silla de su casa y sin el que está de pié; sin el “Catedrático en Cofradías”, que se sabe hasta la colonia que usa el que bordó el manto de cualquier Virgen y sin el que ha venido de tierras lejanas y de costumbres diferentes y pregunta que “si para salir de capuchino hay que hacerse socio” (y eso lo ha escuchado el que aquí suscribe); sin la cara que se le queda al vendedor de globos cuando por despiste se le escapa todo el manojo y sin el ¡oooooooooooooooooohhh! que lanza el público al verlo como si de un ¡Olé! a Morante de la Puebla en cualquiera de sus gloriosas tardes de Feria se tratara. En fin, que no entiendo la Semana Santa sin Ellos y sin todo lo que les rodea, y entiendo que, al rodearlos a Ellos,  siempre será bueno.


Cofradías en la calle. Hermandad del Amor. 


Saeta a la Virgen de las Angustias de la Hermandad de los Gitanos. 


Nazarenos de la Hermandad de la Amargura tras salir de la Catedral. 


Cofradía pasando por los palcos. 


Nazareno dame un caramelo.


Nazareno dame cera.


Mirando al cielo del Viernes Santo y pidiéndole que no llore. 


Con Conchita en el “bar cofrade Garlochí”. 


El vendedor de globos, en este caso vendedora. 


Él, mi Cristo del Cachorro. 


Ella, mi Virgen del Patrocinio. 


Qué te consideras más ¿Cristífero o Mariano?
Por el motivo que sea siempre me he fijado más en Cristo, tanto en su forma de actuar y de hablar como hombre, como en su propia iconografía en los distintos momentos de la Pasión; pero siempre voy acompañado de la mano de María, pues Ella, como Mediadora Universal, me acerca a Jesús, y los dos juntos a Dios.

Además de las Imágenes devocionales de tu Hermandad, ¿qué otras advocaciones te gustan de una forma especial?
Ufff… Creo que puedo estar aquí días escribiendo así que nombraré algunas. El Gran Poder, La Virgen del Dulce Nombre, la Soledad de San Lorenzo, el Nazareno del Silencio, La Esperanza de Triana, la Macarena, la Virgen de las Aguas, la Amargura,  el Señor de Pasión, el Cristo del Calvario, el Cristo de la Salud de los Gitanos… 


Jesús del Gran Poder.

Soledad de San Lorenzo. 

La Macarena. 

Virgen de la Amargura. 

El Señor de Pasión. 

Stmo. Cristo de la Salud. “Los Gitanos”. 


Prefieres las Procesiones, ¿de día o de noche?
Las dos tienen su encanto y no sabría por cuál decantarme. El día me produce una alegría especial al saber que queda mucho por ver. Las Cofradías “con sol” tienen una “vida” muy especial. Me gusta ver brotar el incienso a través de los rayos de luz, creando una cortina translúcida a través de la cuál aparece un Cristo o una Virgen. Por el contrario, la noche me llena de recogimiento, el ambiente se plaga de una belleza extraordinaria, las sensaciones en el corazón se realzan, la emoción está a flor de piel, el sonido de las calles es diferente.


Procesión de día. La Borriquita en la calle Cuna.

Procesión de Noche. El Cristo de las Aguas en la calle Rioja. 


Si tuvieses que asistir a una Semana Santa que no fuese la de Sevilla ni la de Zaragoza, ¿dónde irías?
Pues creo que me iría a ver la de cualquier pueblo del Aljarafe, que además de que tienen una Semana Santa preciosa, estaría muy cerca de Sevilla para hacer alguna escapadita. No obstante me gusta muchísimo la de Málaga.


El Prendimiento de Málaga en la JMJ 2.011


Tanto las Procesiones como las propias Cofradías, aun manteniendo la misma esencia, han ido evolucionando a lo largo de los siglos, ¿cómo te imaginas la Semana Santa dentro de… doscientos años?
Después de lo del “Plan Palio” de 2.011 (una brillante idea de poner sillas a pleno sol para ver las procesiones a las 5 de la tarde, donde se derretían hasta las lagartijas) veo sillas y palcos encima de “las setas de la Encarnación” (Ver foto y explicación más abajo para saber lo que son “las setas”). Es broma. Es complicado imaginarlo, ya que si echamos la vista atrás doscientos años, las Hermandades no gozaban de un momento económico muy brillante que digamos, lo cuál les suponía grandes dificultades para realizar su Estación de Penitencia (Procesión), además de los asuntos políticos por todos sobradamente conocidos. Aspectos que, a fecha de hoy, pueden parecer un tanto utópicos, dentro de dos siglos pueden ser cotidianos. Evidentemente, una reestructuración en el conjunto de los cortejos procesionales puede producirse, y no me refiero a un cambio de itinerario dentro de la Carrera Oficial debido al gran número de Cofradías existentes, sino a asuntos que se han escuchado como una segunda Madrugá, tema ya tratado en el siglo XIX y que tendría lugar la madrugada del Miércoles al Jueves Santo con el objeto de que las Cofradías de nueva creación tengan su sitio. Para entonces, Hermandades de algunos barrios que a fecha de hoy no realizan su Estación de Penitencia a la Catedral, o incluso todavía son pequeñas Agrupaciones Parroquiales pueden tener mucha fuerza, pues todos sabemos que las devociones en las zonas de la periferia de Sevilla arrastran multitudes. Respecto a la música seguro que habrá cambios, aunque siempre se conservarán las marchas tradicionales como pasa ahora. Lo mismo ocurre con la forma de andar de los Pasos, que aunque se innove siempre perdurará la herencia de los costaleros antiguos. Las Imágenes nuevas que se realicen seguirán en la misma línea, es decir, que supondrán verdaderas obras de arte, y todos sabemos que el barroco predomina en nuestra Semana Santa. Puede que se produzcan más transformaciones en el público por los cambios que se puedan dar en la propia sociedad, lo que conllevará a algún tipo de costumbre o moda  nueva a la hora de ver las Procesiones como ocurre ahora con el hecho de llevarse sillitas plegables,  pero nada más. La Semana Santa es la que es y de la forma que es, pero siempre, siempre, con devoción hacia Ellos.



Elemento arquitectónico implantado en la Plaza de la Encarnación
conocido popularmente como “las setas”.


Un aroma de la Semana Santa que te guste.
Me gusta mucho el olor a flores recién mojadas que hay en las iglesias en Semana Santa. El incienso también es un aroma que me produce cierta sensibilidad. A veces, al pasar una Cofradía, el olor a incienso se mezcla con el de las torrijas de cualquier confitería dando como resultado un aroma dulce muy particular. Me gusta también el olor a naranjos que tiene Sevilla al comenzar la primavera. El Templo del Cachorro también tiene un olor particular que me produce cierto sosiego, puede que sea porque ahí estén mi Cristo y mi Virgen, pero es cierto; y el olor de las mañanas fresquitas de primavera, que invitan a irse a ver  Capillas.

Incienso. Hermandad de Jesús Despojado. 

Jesús Despojado pasando entre naranjos. 

Y si hablamos de olor, no nos vamos a quedar sin el sabor, así que… ¿qué te gusta comer en Semana Santa y dónde?
El bacalao frito del “Mudo” antes de ver la salida de la Cofradía del Carmen Doloroso, los papelones de la freiduría del Arenal, las croquetas de Casa Ricardo, el menudo con garbanzos de La Fresquita, el adobo en cualquier taberna de Triana, los montaditos de la Bodeguita de Santa Ana, las papas aliñás del Amarillo Albero, los higaditos de pollo de La Sevillanía,  la mojama del Faro de Triana, la ensaladilla del Martín, los “piripis” de la Bodeguita de Antonio Romero, cualquier tapa en el buen ambiente cofrade que se respira en El Refugio…

Bar cofrade El Refugio.


En El Refugio con Antonio (propietario del bar) y
 con Daniel (también hermano del Cachorro). 



Y ya para terminar, y puesto que estamos entre tertulianos, ¿qué es lo que más te gusta de nuestra Tertulia?
La verdad es que somos como una familia. Cada uno de nosotros tenemos nuestros grupos de amigos ajenos a la Tertulia, y luego a parte, el grupo de los que formamos la Tertulia. Nos conocíamos todos prácticamente desde la adolescencia, a excepción de Conchita, pero al casarnos los conoció a ellos. Hemos formado un buen grupo, al que cada uno aporta algo especial y diferente al resto. Hay amistad, cariño, ilusión y muchas ganas por hacer las cosas, que es lo más importante. El lema de nuestra Tertulia habla por sí sólo: CORAZÓN, SENTIMIENTO Y AMISTAD.

Un beso cofrade de todo corazón.